Mis experimentos con Mepis y Antix en mi sujeto de pruebas (una computadora realmente vieja) no resultaron tan bien como esperaba; parece que los requisitos mínimos de memoria de ambas distros (256 Mb. de Ram para Mepis y los 128 Mb.de Ram para Antix) fueron demasiado para los escasos 64 Mb.de Ram de esta pieza de colección. Mepis no llegó a mostrarme la pantalla de ingreso y Antix, a pesar de hacerlo, consumió el último Kb. de Ram antes de desplegar el escritorio.
Como temía una eventualidad similar, también me aseguré de que las dos distros fueran acompañadas por Puppy Linux (quien también exige alrededor de 128 Mb. de Ram). Puppy sí logró llegar al final y me mostró el escritorio. Desgraciadamente, el ratón de la computadora neolítica atestó un golpe fatídico a mis progresos: funcionaba a través de un puerto D-Sub...¡Sí, el anterior al Ps/2!
Puppy no supo qué hacer con ese ratón milenario...ni yo qué hacer con un escritorio de Puppy y su puntero inmóvil en su centro. Después de varios intentos inútiles por localizar el modo de movilización mediante el teclado, me vi forzado a cerrar la sesión y terminar mis experimentos.
El dinosaurio ganó la primera batalla, pero no la guerra; hoy aprendí la forma de desplazarme mediante el teclado: se oprime ALT+F1 para activar el menú y se utiliza TAB para seleccionar.
También aprendí que Puppy posee una especie de centro de control del cual se puede escoger entre varias posibilidades para intentar habilitar al lánguido ratón. Ese será mi próximo proyecto.
¿Y si Puppy falla?
Linux siempre presenta alternativas; ya tengo un nuevo aliado para esta batalla por revivir una computadora prehistórica: Damn Small Linux.
Damn Small es una mini-distro basada en Knoppix y pesa tan sólo 50 Mb. Según afirman sus desarrolladores, funciona incluso en equipos con tan sólo 16 Mb.de Ram.
Hoy probé esta mini-distro iniciándola desde mi llave USB y ejecutándola en Windows...funcionó sin problema. Todavía no he logrado adaptarla para que se ejecute desde mi llave USB directamente, pero pronto lo lograré. De todos modos, lo de la llave USB es inútil para mi sujeto de pruebas ¡esa pobre computadora ya había visto la luz del sol cuando apenas se estaba desarrollando el puerto USB en 1994!
¿Podrá Puppy revivir una computadora tan vieja? Si no reconoce del todo al ratón, será el turno de Damn Small entonces.
Buena suerte con el DSL.
ResponderEliminarA pesar de las buenas críticas de Puppy, yo ya no confío en esa distro... Cuando realmente la necesité para rescatar una computadora, me falló. Solo Mepis (y Mandriva, en menor medida) pudieron ayudar entonces.
A cada distro lo suyo. Ya vio, donde Mepis no funcionó para el proyector, a Mandriva no le presentó ningún reto. Ya Puppy tendrá su momento.
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