viernes, 4 de junio de 2010
Los virus de las memorias USB...
En los años del dinosaurio, uno podía sellar los diskettes contra escritura, lo cual impedía la propagación de los virus de entonces, tan fósiles hoy como los diskettes.
En la actualidad, los virus de las llaves USB son mucho más molestos que sus predecesores de los "floppy disks". Es prácticamente imposible impedir que entren a las memorias como bucaneros que asaltan una embarcación desarmada. De nada sirve bloquear el archivo autorun.inf. Tampoco los detienen los antivirus fijos ni los "portables".
Y como si fuera poco, estos pequeños truhanes son maestros del disfraz: a veces ocultan los archivos verdaderos y los suplantan descaradamente. De esa manera, el inocente usuario los ejecuta pensando que está ejecutando sus archivos verdaderos. En otras ocasiones, destruyen todo el contenido de las llaves USB. Normalmente,los diminutos malandrines se protegen con la capa de invisibilidad de Harry Potter para deambular por todo el castillo sin ser detectados, pues saben que no existe el Mapa del Merodeador que los descubra...
¡FALSO! ¡El Mapa del Merodeador SÍ existe!
Ayer, una colega que tuvo problemas con su llave USB me la trajo para que la revisara. Según su computadora, la llave presentaba problemas y no podía abrirse, aunque podía guardar. Intentó repararla pero el esfuerzo fue infructuso.
Introduje la memoria en mi modesta netbook que funciona con SimplyMepis Linux y...
El contenido se pudo visualizar sin problema: estaban los archivos más recientes que ella había guardado...y junto a ellos, un par de misteriosos archivos ejecutables de nombres ilegibles, el archivo autorun.inf y una carpeta invisible. Eliminé el archivo autorun.inf y probé la llave en otra computadora con Windows XP. ¿El resultado? Logró visualizar el contenido de la memoria, pero solamente presentaba los archivos guardados posteriormente a la infección.
De nuevo en Linux, mi colega pudo ver otra vez los archivos invisibles...se veían muy cómodos en su memoria USB...¡Linux es el Mapa del Merodeador!
Paso siguiente, cambiar los permisos de los archivos (estas pestes normalmente se protegen prohibiendo su modificación) y el resto fue solamente eliminarlos.
Fácil, rápido y SIN ANTIVIRUS. ¿Qué más puedo pedir?
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Buenísimo el post. Yo ya había olvidado eso de los virus de floppy, aunque algunas veces me pregunto si proteger las USB contra escritura lograría aliviar el problema... después de todo, las tecnologías ahora habilitan scripts de lectura...
ResponderEliminarLinux, sin embargo, tiene la ventaja de que los archivos ejecutables NO se pueden ejecutar por sí mismos y así deja los virus usando el traje del Rey, jajaja!
¡Viva TUX!
Muy interesante, no estaba bien informada respecto a los virus de las memorias usb. Gracias.
ResponderEliminarMuchas gracias por la visita y por el comentario, Verónica. Espero que la información te haya sido de utilidad! ^__^
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